Advanced Electric Machines (AEM) consigue desarrollar motores eléctricos sin imanes raros
La compañía británica Advanced Electric Machines (AEM) ha conseguido desarrollar motores eléctricos sin imanes permanentes de tierras raras, resolviendo con ello el problema de los motores de reluctancia conmutada. AEM, se define como “una empresa británica que ha encontrado una solución a lo que es un problema mundial”.
En su lugar, estos motores se basan en la sincronización precisa del suministro de energía para crear campos electromagnéticos, lo que significa que pueden construirse con metales asequibles como puede ser el acero.
Ahora, la empresa se encuentra en busca de financiación de 30 millones de libras en los próximos meses para aumentar su capacidad de producción en el Reino Unido. Más tarde, la empresa tratará de conseguir otros 220 millones de libras en el plazo de un año para crecer todavía más, antes de la prohibición del Reino Unido de los coches de combustión fijada para 2030.
El antiguo vicepresidente de Ford, Peter Fleet, ha sido nombrado presidente para supervisar la recaudación de fondos y la ampliación de AEM. Se espera que la ronda inicial sirva para pasar de una capacidad de producción de 10.000 motores al año a al menos 100.000. Fleet, dijo:
“Se trata de una tecnología única que no sólo es ecológica porque no necesita imanes raros, sino que también es más ligera y potente que los motores tradicionales, y está envuelta en patentes que resuelven los retos que la rodean.”
AEM está en conversaciones con fabricantes de automóviles de todo el mundo para que adopten su tecnología, trabajando con marcas como Bentley y Tevva. Fleet, concluye:
“Los imanes raros van a ser un problema cada vez mayor a medida que la industria automovilística se electrifique; ya hemos visto duplicarse los precios de algunos imanes en el último año.”
El coche eléctrico es una revolución que está impulsando muchos avances tecnológicos en muchas disciplinas, en este caso los motores.
En motores eléctricos pensaba que ya estaba todo inventado. Me alegra equivocarme.