El Bus Rapid de Madrid, totalmente eléctrico, no empieza con buen pie su servicio, obligando rehacer parte de las obras
Con el inicio del servicio del Rapid Bus totalmente eléctrico que recorrerá las calles de Madrid, el Ayuntamiento de Madrid se ha visto obligado a rehacer las obras acometidas para que dicho autobús realice su servicio, dado que se han dado cuenta que los vehículos no pueden girar en las rotondas.
Parece que el bus rápido de Madrid no está empezando con buen pie en la capital española, y es que al margen de que no es problema del vehículo en cuestión, las obras que se han realizado para acondicionar las vías a favor de su circulación por un carril específico, han hecho que no se calculase correctamente el giro necesario para que los vehículos se incorporen correctamente a las rotondas, teniendo que subirse en muchas ocasiones a la mediana para poder realizar la maniobra, tanto el Bus Rapid como los autobuses convencionales.
El autobús rápido que estrena Madrid es bastante similar a un tranvía, al margen de su similar diseño, por contar con prioridad semafórica a través de un carril exclusivo. A diferencia de los tranvías, su coste e implantación es menor que la de este, por lo que se convierte en una opción muy a valorar para ofrecer el mismo servicio que un tranvía.
Tras un esperado estreno, las cosas no han ido como deberían debido al fallo de cálculo que comentábamos anteriormente. Esto es bastante grave si tenemos en cuenta que las obras han costado un total de 18 millones de euros, de los cuales 5,3 han estado destinados a los autobuses y los 12,8 restantes a la construcción de la infraestructura necesaria. Por tanto, a este gasto total hay que sumar ahora el de rehacer las obras para solventar estos fallos.
Los vecinos de Sanchinarro, el barrio madrileño por el que discurre la ruta de este autobús rápido, están muy decepcionados con el resultado, además de quejarse de haber eliminado carriles a favor del nuevo autobús. En cuanto a los conductores de la EMT, aseguran que a pesar de que algunos de los giros en las rotondas ya han sido solventados, rebajando las isletas, sigue siendo bastante complicado hacer la maniobra de incorporación a las rotondas, opinando que es “una chapuza”.