Un reglamento que regula la conducción autónoma liderado por Naciones Unidas puede ser un paso atrás en uso de esta tecnología
En ocasiones da la sensación de que en vez de ir hacia delante se dan pasos en dirección contraria, hacia atrás, y este puede ser uno de ellos que afecta directamente a la conducción autónoma.
Han sido 60 países de todo el Mundo que se han acogido a un nuevo reglamento realizado por Naciones Unidas que impone duras restricciones a los sistemas de conducción autónoma actuales como los conocidos y cada vez mas populares sistemas de mantenimiento carril.
Aunque, hay otros sistemas que se verán mucho más perjudicados, como puede ser el caso del Autopilot, sistema que ya en Europa sufre con unas fuertes limitaciones respecto a su potencial real.
Se trata de la primera norma internacional cuyo objetivo es regular de forma común la implantación de estos sistemas de conducción autónoma y de esta forma avanzar en el desarrollo de esta tecnología pero con unas limitaciones importantes a día de hoy.
Por el momento, este primer documento se centra especialmente en el sistema de mantenimiento de carril, el cual solo se podrá activar en carreteras en las que ni peatones ni ciclistas puedan circular, en otras palabras, tan solo se podrá activar en autovías y/o autopistas, ya que además será obligatorio que exista una separación física del tráfico de ambos sentidos de dirección.
Pero si esto ya no fuera poco de lo que supone la limitación de este sistema en determinados lugares, el sistema de asistente de carril tan solo podrá ser activado cuando se circule a una velocidad máxima de 60 km/h, por lo tanto su uso estará totalmente capado.
Japón ha sido el primero en adoptar estos sistemas, ya que ha informado que desde el pasado mes de junio están tomando medidas para aplicarlo. La Unión Europa ha confirmado que entrará en vigor el próximo mes de enero de 2021.
Por otra parte, el reglamento limitará el uso de determinadas funcionalidades de entretenimiento del vehículo, siendo desactivadas en el momento que el sistema de asistente de carril solicita la asistencia del conductor para tomar el control del vehículo. Esto se traduce que por ejemplo elementos no útiles para la conducción como puede ser el sistema de infoentretenimiento se deshabilitarán en ese momento.
Finalmente, este documento de Naciones Unidas obliga a todos los vehículos con un sistema de asistente de mantenimiento de carril a que incluyan dos funcionalidades, por una parte, el vehículo en caso de que el conductor no responda a los avisos de tomar el control del vehículo deberá de ser capaz de realizar una parada de emergencia.
Por otra parte, los vehículos deberán de llevar una especie de caja negra llamada DSSAD (Data Storage System for Automated Driving) que almacenará en todo momento cuando se activa el sistema de mantenimiento de carril. De esta forma en caso de accidente o incidencia se podrá saber en cualquier momento si el sistema estaba activo o no.

Para acabar, Naciones Unidas ha añadido una lista de conducciones obligatorias que se deberá de cumplir para que se pueda activar el sistema de mantenimiento de carril y son los siguientes:
- El Conductor deberá de estar en su asiento con el cinturón abrochado
- El conductor tiene que estar disponible para tomar el control del vehículo en cualquier momento
- No detectar ningún fallo que afecte al correcto funcionamiento del sistema.
- El DSSAD debe de estar operativo.
- Confirmación del sistema de chequeo automático.
- El vehículo circula por carreteras donde no pueden circular ni peatones ni ciclistas y los dos sentidos de circulación están separados por elementos físicos.
- Las condiciones medioambientales e infraestructuras son adecuadas para activar el sistema.
Está claro que debe de existir una regulación global que permita controlar estos sistemas tan avanzados cuyo objetivo es la conducción autónoma total, sin embargo tal y como se está gestionando parece que se está dando un paso atrás y que muchos sistemas más avanzados que ya están funcionando correctamente supondrán varios pasos atrás en sus funcionalidades.
Aquí podéis leer el documento íntegro de Naciones Unidas al respecto.