En la actualidad se ha promovido muy bien el autoconsumo fotovoltaico, ya que permite reducir de forma considerable el gasto de electricidad a través del uso de paneles solares que captan la energía solar para posteriormente aprovecharla de distintas formas.
De esta manera, muchas empresas se han interesado en fabricar y distribuir placas solares, con el propósito de contribuir con este nuevo modelo energético global. No obstante, la garantía de estos productos ha generado mucha polémica, ya que los fabricantes ofrecen dos tipos, la garantía del producto y de producción.
Y ese precisamente es el objetivo de este post, aclarar un poco qué variables y factores engloba cada una de estas garantías.
¿Qué significa la garantía de producto y de producción?
Las empresas distribuidoras de placas solares como SunFields ofrecen tanto la garantía de producto como de producción a sus clientes, ya que se caracterizan por comercializar dispositivos que captan la energía solar con alto rendimiento y un equipamiento fotovoltaico de alta calidad.
En lo que se refiere a la garantía de producción, esta está relacionada con el tiempo que el fabricante asegura al cliente que la placa solar funcionará de forma óptima. Por lo general, es un 90% de producción mínima dentro de los 10 años posterior a la compra y un 80% a los 25 años.
Cuando se trata de la garantía del producto, se involucran los componentes que integran el panel solar y el propio dispositivo. No obstante, normalmente esta garantía se sitúa entre los 10 y los 15 años, lo cual resulta contradictorio con respecto a la de producción.
¿Por qué una garantía cubre más tiempo que la otra?
La principal causa de que las compañías distribuidoras de paneles solares ofrezcan mayor tiempo de garantía en cuanto a la producción, es porque si el dispositivo sufre algún daño o se quema después que se haya cumplido la garantía del producto, la de producción no va a cubrir ese problema.
Sin embargo, la estrategia de los fabricantes que ofrecen un margen máximo de 15 años de garantía de producto, es porque utilizan materiales más baratos para la composición del panel solar, lo cual le permite ofrecer a los clientes un precio más atractivo por debajo del valor de la competencia.
¿Qué es lo más recomendable?
Lo más aconsejable es comprar placas solares de fabricantes que garanticen el mismo periodo de tiempo tanto en la garantía de producto como de producción, por lo cual no habrá que preocuparse por las letras pequeñas de los contratos.
¿Cuáles son las mejores placas solares?
En el sector de la energía fotovoltaica se pueden encontrar diversidad de modelos de placas solares, como el monocristalino, silicio amorfo y policristalino. No obstante, los fabricantes recomendados son los que trabajan con dispositivos monocristalinos, los cuales ofrecen mayor rendimiento y calidad en comparación con otras tecnologías.
¿Cómo se realiza el mantenimiento de los paneles solares?
Las placas solares están compuestas por células fotovoltaicas de silicio, las cuales son extremadamente resistentes a los cambios meteorológicos como el granizo, por lo cual no requieren de mayor mantenimiento las de instalaciones de autoconsumo solar residencial.
Otras instalaciones fotovoltaicas no tienen partes móviles, lo cual disminuye el riesgo de averías y problemas en estos dispositivos. No obstante, para que las personas se puedan anticipar a cualquier incidencia, los instaladores aconsejan colocar elementos de monitorización de rendimiento.
Es importante destacar que en la mayoría de los casos estos dispositivos se limpian de forma natural con la lluvia, sin embargo, en lugares donde se producen cambios climatológicos drásticos, el rendimiento puede disminuir en un 15% a lo largo de su vida útil.
¿Qué impuestos se deben pagar por el uso de paneles solares?
El uso de estos dispositivos no es que sea de gran demanda en España, pero si son muchas las personas que se han interesado en contar con un panel solar en su vivienda, sin embargo, algunas no disponen del presupuesto.
A pesar del poco uso de estas placas solares, en el año 2015 se creó la ley del sol, la cual regulaba la utilización de este tipo de energía, sobre todo a los consumidores a gran escala, lo cual significa que los usuarios que tienen instalaciones fotovoltaicas en el hogar no están obligadas a pagar impuesto.
Queda claro que solo deben pagar impuesto las personas que quieran vender la energía que les sobre a partir de las placas solares que tienen instaladas, por lo cual deberán estar registradas en el Ministerio de Industria Energía y Turismo, aparte de contar con un sistema que mida la energía volcada en la red.
Sin duda, las placas solares son una excelente solución de ahorro energético. Solo es cuestión de elegir un dispositivo de un fabricante que ofrezca una garantía similar de producto y de producción, ya que de esta manera el cliente tendrá mayores posibilidades de durabilidad de la instalación fotovoltaica.
