Los ciclomotores eléctricas llegan a Cuba, como solución ante la escasez de combustible y promoviendo una movilidad sostenible
Debido a la escasez de combustible que sufre Cuba, después de que Washington impusiera restricciones a los envíos de combustible de Venezuela, principal aliado de Cuba, se ha promovido una interesante iniciativa que, no solo salva al país de dicha escasez, si no que además promueve una movilidad sostenible.
Según algunos informes, Cuba operaba con sólo alrededor del 30% de sus suministros típicos de combustible en septiembre, después de que se impusieran restricciones a las exportaciones de combustible venezolano.
Con la red de transporte público muy afectada debido a dicha escasez, el presidente Miguel Díaz-Canel pidió a los propietarios de vehículos que recogieran a los pasajeros voluntariamente, y las motos eléctricas, denominadas en Cuba como ‘motorinas’, han respondido a la llamada.
Las autoridades cubanas estiman que hay 210.000 ciclomotores eléctricas actualmente en uso en la isla, y se espera que la cifra aumente, dado que su precio es de entre 1.800 y 2.300 dólares, lo que resulta un precio muy por debajo de una moto de gasolina.
Después de que la escasez de combustible llegara, el Gobierno cubano decidió imponer un precio máximo de 1.700 dólares para la adquisición de estos vehículos eléctricos, lo que sin duda promoverá su compra, consiguiendo además de solventar el problema del combustible, convertirse en un país más sostenible.
