Amsterdam será la próxima ciudad europea en implementar este sistema de radares de ruido en la ciudad
En la era de la tecnología avanzada, las ciudades están implementando sistemas cada vez más sofisticados para monitorear y regular el comportamiento en las carreteras. Desde radares térmicos para controlar el uso de carriles BUS-VAO hasta radares de sobrepeso para proteger las infraestructuras, la innovación no tiene límites.
Pero, ¿Qué hay de la contaminación acústica, una amenaza emergente para la salud pública? Ámsterdam, Róterdam y Bruselas son algunas de las ciudades europeas que están tomando medidas para combatir este problema mediante la implementación de radares de ruido. ¿Quieres saber cómo funcionan? Sigue leyendo.
¿Qué son los radares de ruido?
Inspirados en el concepto de radares pedagógicos, que utilizan señales visuales para alentar a los conductores a cumplir con los límites de velocidad, los radares de ruido están diseñados para combatir la contaminación acústica.
La instalación consta de un medidor de ruido con cuatro micrófonos y una pantalla debajo. Si el medidor detecta un sonido que excede los 83 decibelios, el conductor recibirá un mensaje de advertencia visual. En el caso de Ámsterdam, el mensaje es “Te luid”, que significa “demasiado alto” en holandés.
¿Cómo están conectados a las multas?
Además de proporcionar retroalimentación visual, la cámara de estos radares está vinculada a un cinemómetro que captura una foto de la matrícula del vehículo. Esta función permite emitir multas si es necesario. Sin embargo, estas ciudades están en una fase de prueba para determinar si el “modo pedagógico” por sí solo es efectivo para reducir los niveles de ruido.
Las Implicaciones para la salud
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el ruido del tráfico es la segunda causa más significativa de problemas de salud en Europa Occidental, justo detrás de la contaminación del aire. Un estudio del Servicio de Salud Pública de Ámsterdam también encontró que las motocicletas son la principal fuente de contaminación acústica en la ciudad. Es crucial abordar esta amenaza para la salud pública.
¿Cuál es el precio de la infracción?
En Róterdam, donde también se están utilizando micrófonos para recopilar datos sobre la contaminación acústica, el incumplimiento de los niveles de ruido puede resultar en una multa de 280 euros.
Proyectos piloto y expansión
Bruselas no se queda atrás y ha lanzado un proyecto piloto para probar dos radares de ruido como parte de su lucha contra la contaminación acústica. Es probable que otros países europeos sigan este ejemplo si los resultados son prometedores.
La contaminación acústica urbana es una de las amenazas ambientales emergentes más preocupantes a nivel mundial. La implementación de radares de ruido en ciudades europeas representa un paso significativo hacia la creación de espacios urbanos más saludables y habitables. Estos dispositivos no solo tienen el potencial de reducir el ruido, sino también de sensibilizar al público sobre el impacto de la contaminación acústica en nuestra salud y bienestar.
Es hora de que más ciudades adopten tecnologías similares para combatir esta forma invisible pero peligrosa de contaminación.
Cuando se habla de la contaminación de los coches de combustión no hay que olvidar el ruido que producen.