Varios ex-trabajadores de Tesla aseguran que dentro de la compañía se compartían vídeos grabados por las cámaras de los coches
Uno de los grandes temores que existen actualmente es la privacidad de los datos e información, la tecnología tiene muchas cosas positivas pero si su uso es inadecuado puede ser un grave problema.
Hace unas semanas Tesla detalló como gestiona la privacidad de los datos(imágenes) que captura a través de las cámaras de los clientes de un coche Tesla, unos datos que tienen como único fin ser usados de forma interna y anónima para mejorar el software del vehículo y hacerlo cada vez mejor.
Se hace especial énfasis en situaciones donde el coche ha sufrido un accidente o ha tenido un comportamiento anómalo del Autopilot o de la beta del FSD, con esa información permite a los ingenieros hacer aprender a la IA a que se comporte de forma más óptima en circunstancias parecidas.
Pero claro, todos estos datos y vídeos se guardan en los servidores de Tesla y dicha información puede ser accesible por algunos trabajadores de la compañía, y algunos de estos empleados parece que no hacían buen uso de esa información y datos tan sensibles tal y como ha indicado el medio Reuters.
Es cierto que Tesla sigue asegurando que los vídeos y datos recopilados de parte de los clientes son almacenados de forma anónima, es decir, que se desconoce quien es el usuario de ese Tesla y que coche es realmente (no se guarda el VIN). De esta forma se garantiza Tesla a que identificar al propietario sea más difícil.
Algunos empleados de Tesla compartían vídeos comprometidos de los clientes
Reuters ha entrevistado a nueve ex-empleados de Tesla, los cuales aseguran que dentro de la compañía se compartía algunos vídeos que podían resultar ser graciosos o incluso calificarse como vídeos comprometidos para el cliente.
En dicha entrevista, podemos leer algunas afirmaciones de los ex-empleados como la siguiente:
“Pero entre 2019 y 2022, grupos de empleados de Tesla compartieron en privado, a través de un sistema de mensajería interno, videos e imágenes a veces muy invasivos grabados por las cámaras de los automóviles de los clientes, según entrevistas de Reuters con nueve ex empleados.”
Dichas afirmaciones incluso van mas allá, donde aseguran que compartieron de forma interna vídeos muy comprometidos como a gente desnuda dentro de los vehículos.
También, otro empleado afirmó que había vídeos donde se podían ver los garajes de los propietarios, incluso ver lo que había en su interior, incluso pudiendo detectar posibles cosas de gran valor.
“Pudimos ver el interior de los garajes de las personas y sus propiedades privadas. Digamos que un cliente de Tesla tenía algo en su garaje que era distintivo, ya sabes, la gente publicaría ese tipo de cosas.”
¿Es realmente culpa de Tesla?
Podríamos decir que en una primera instancia el responsable de que estos posibles vídeos (ninguno ha salido a la luz por el momento) se compartiesen entre trabajadores de la compañía es Tesla, ya que debería de haber realizado los procedimientos adecuados para que esto no fuera posible.
A favor de Tesla, también es cierto que impedir determinadas acciones de los empleados es tremendamente difícil, y es que aunque Tesla no permita descargar o extraer los vídeos fuera de los servidores si que permite visualizarlos, ya que esos vídeos sirven para recolectar información datos y que la IA realice una toma de decisión más adecuada.
Al poder visualizarse es imposible asegurar que un trabajador que tenga acceso a la visualización de los vídeos no grabe mediante un móvil el vídeo y luego lo transmita a otras personas.
Tesla no es culpable en el supuesto de que cuente con un protocolo de seguridad certificado y homologado. Los trabajadores son los que haciendo uso y abuso de la información que reciben para realizar su trabajo no cumplen con el protocolo de protección de datos confidenciales de la compañía. Es lo mismo que la policía y los médicos que tienen acceso a información confidencial que no pueden ni deben usarla fuera de su trabajo.